lunes, 1 de abril de 2013

Escoge bien a tus socios... o de como iniciar una empresa con gente que vale la pena

Que tal, después de mucho tiempo en hibernación he decidido resucitar mi blog, no puedo garantizar que ahora sí será en serio que publicaré cosas de manera más regular, pero por lo menos trataré que si haya contenido interesante para el visitante casual.

Esta entrada yo creo que va a ser de las más importantes que pueda ofrecer, ya que aquí verteré experiencia de unos 8 años en las cuales me he dado a la tarea de encontrar gente con la cual poder conjuntar esfuerzos y poder realizar cosas interesantes, para ser más específicos, crear una empresa que nos permita crecer y salir adelante.

Pero bueno, vamos al fondo del asunto ¿porqué estoy escribiendo este artículo? Primero que nada como recordatorio, ya llevo años identificando varios patrones de conducta totalmente contrarios  y hasta tóxicos para una empresa, y si bien dicen que el tener una sociedad es como un noviazgo o matrimonio, en el cual te casas con tus socios, yo creo que es una situación todavía más delicada y compleja, y si no tienes cuidado puedes arruinar tu empresa, a tus empleados, y, finalmente, perder amistades.

Sirva esto como un listado para identificar situaciones de riesgo en tus socios, o en ti mismo:

Un empresario no se toma las cosas personales

No puedes llegar a ser un líder o a tomar decisiones si sientes que la gente te critica o ataca, o si planeas cobrar venganza por un altercado anterior. Si tu socio se toma una situación de negocio de manera personal, te ataca a ti u otros socios, o comienza a tener actitudes tóxicas, es una señal de alerta muy fuerte de que esa persona no es la ideal con la que quieres llevar a cabo un proyecto de vida.

Negocios son negocios, punto, de repente existirán situaciones en las que la misma pasión de la discusión te lleve a agredir de maneras no propias, pero debes poder arreglar esas situaciones y no arrastrarlas a eventos posteriores.

Un empresario debe enfocarse en su objetivo de negocio

Considero que uno crea su propia empresa con múltiples sueños e ideas, de hecho creo que es ese es uno de los principales pilares en los cuales uno debe sostenerse como emprendedor, siempre buscando más, nuevas metas, sueños que alcanzar.

El problema llega cuando dicho sueño no es compatible con la empresa, cuando estás trabajando en desarrollo web pero piensas en poner un autolavado, y peor aún, empiezas a escudriñar la localidad buscando el lugar perfecto para un autolavado, cuando no tienes la experiencia de montar un negocio de ese tipo, ni tienes el dinero para invertir en él, o peor aún, desconoces totalmente como opera.

Un foco rojo en este punto, es cuando ves a tu socio perder tiempo en horario de trabajo buscando como satisfacer una idea guajira totalmente ajena al negocio, incluso realizando llamadas telefónicas o enviando correos solicitando informes. A todos nos pasa que de repente nos dispersamos de los deberes cotidianos, pero si esa persona le dedica el 20% del tiempo a realizar labores de la empresa y el otro 80% en cosas ajenas, ya se torna problemático

No se debe generar un ambiente tóxico de trabajo

Es normal tener días malos, mucho más normal tener clientes o proveedores que te pongan de malas, que pidan cosas fuera de especificación, salgan con alguna bateada de babas, algún equipo malo, situaciones que arruinen ese bello y soleado día que a uno le hubiera gustado tener, pero ello no es pretexto para hacerle la vida imposible a los que te rodean. Sobretodo, es fundamental mantener un ambiente de respeto en la empresa, ser el jefe, ser el dueño, ser el socio, no te da ningún derecho a denigrar a los que te rodean, de gritonear o pisotear solo por un coraje.

Una persona madura debe controlar su temperamento, y especialmente un empresario debe tener la cabeza fría, no se pueden tener rabietas o pucheros a cada semana o cada que se pague impuestos, se vale desahogarse, pero no se vale desquitarse, recuerda, tus socios son las personas con las que más tiempo vas a convivir (más que con tu familia, más que con tu pareja), a un empleado lo puedes correr pero difícilmente te vas a librar de un socio, así que toma en cuenta si esa persona que tiene ataques de ira, que no puede controlar su temperamento, es la ideal para que ejecute un plan de vida junto contigo.

Los problemas de la sociedad, se hablan en privado

Va a ser muy normal que te pelees con tus socios, es parte de la diversión en formar tu empresa, finalmente pasas más de 40 horas a la semana conviviendo con ellos (yo he tenido semanas de 60 y hasta 80 horas de insana convivencia), discutiendo problemas, escuchando quejas, enfrentándote a situaciones que ponen a prueba tu entereza, tu tolerancia y tu paciencia, obviamente se ocasionarán conflictos de manera eventual, sucederán situaciones y cometeremos errores, y habrá que sancionarlos, ya sea con un regaño, una llamada de atención o de plano algo más fuerte. Pero en el caso de que el conflicto sea entre socios, hay que tener mucho cuidado y resolverlos en privado, las discusiones frente a los empleados solo generan luchas de poder, un socio termina con su liderazgo mermado frente al resto de las personas.

Si tu socio peca de soberbia y se encasilla en pleitos estériles con tal de demostrar su superioridad sobretodo enfrente de empleados o terceros, es la señal más fuerte de abandonar el barco.

Si eres emprendedor, debes dedicar el 100% de tu tiempo a tu proyecto

"No puedo dejar mi trabajo, pero por las noches puedo dedicarme a sacar cosas", es la frase más adecuada que puedes escuchar para ni siquiera aventarte a hacer un proyecto. Si quieres empezar un negocio, debes dedicarte al 100% a ello, es tu hijo, es tu sueño, es tu meta. En mi experiencia, he tenido socios o asociados, con esposa, con un trabajo diurno, con familiares que atender, y honestamente, nunca han funcionado. Parecería que para tener una empresa debes ser joven, soltero y sin ningún tipo de dependencia con tus familiares para poder llevarla a cabo con éxito.

Si tu socio empieza a excusarse continuamente por estar apoyando a su familia, por tener que hacer trámites, dejar cosas para después porque tiene que atender a su esposa o hijos, definitivamente no es la persona con la que te debes asociar. Simplemente piensa si tolerarías que un empleado faltara 4 o 5 días cada mes (o peor aún, cada quincena) para hacer favores o atender asuntos ajenos al negocio.

Todos tenemos necesidades, a todos nos surgen imprevistos, salvo que seas adoptado o huérfano, siempre tendrás una familia a la cual apoyar en ciertos momentos de crisis, pero si ello se vuelve un obstáculo para poder ejecutar un negocio, estás perdiendo tu tiempo, y peor aún, el de tus socios.

Transparencia y comunicación, valores fundamentales

Más rígido que con tu pareja, la transparencia y la comunicación entre socios es más que fundamental. Los clientes, proveedores y empleados siempre detectarán cuando hay fallas de comunicación en el equipo que toma las decisiones, y tratarán de tomar partido y ventaja de ello, aún y cuando sea de manera inconsciente. Si alguna vez aplicaste con tu padre la clásica "¿Me das permiso para ir a la fiesta? Ya le pregunté a mi mamá y me dijo que si tu aceptabas, no había problema", es muy probable que estes consciente como es que pueden usar esas fallas de comunicación en tu contra.

¿Transparencia? Sí, y todas las cuentas deben cuadrar al centavo, tanto la caja chica, como viáticos, como gastos diversos. Hacienda te da una tolerancia de 3% en la discrepancia de tu contabilidad, internamente, y especialmente en cuestiones delicadas con tus socios, debe ser cero, punto. Todavía recuerdo un episodio de un ex-socio que manejaba la caja chica, y le faltaban como 150 pesos, su pretexto fue "no se puede llevar con precisión, es como las cajas del super, nunca tienen todo cuadrado al centavo". A la fecha me sigo preguntando que tan complicado era llevar las cuentas de una caja que tenía 4 o 5 movimientos al mes, y también si el dinero se esfumaba por estar almacenado y por eso existían esas discrepancias.

Si un socio hace movimientos sospechosos respecto al manejo del dinero, es señal inequívoca de que debes deshacerte de él, punto, no hay vuelta atrás. Hoy son 50 pesos, mañana pueden ser millones.

Una empresa no te va a remunerar desde un principio

Nunca, así tengas la idea más millonaria del momento, esa idea que a nadie más se le ha ocurrido (y te saco de tu engaño, seguramente a alguien más se le ha ocurrido). Pero tampoco puedes estar vagando por la vida teniendo la esperanza de que algún día te va a redituar. ¿La solución? ten metas claras, por el amor de Dios, ten un plan de negocio, una cifra meta y un periodo de tiempo para alcanzarla, y sobretodo, medios para medirla y evaluarla. Creerte la eminencia en ventas, y ser el más lengua larga del mundo no te sirve si no planificas bien y ejecutas un plan trazado previamente. Esto te dará esperanza cuando tengas seis meses nefastos seguidos, y te evitarán la soberbia de creerte en la cima cuando solo haz tenido dos meses con números negros.

La única regla en los negocios que me ha funcionado de manera infalible es planea, ejecuta y mide, vuelve a planear, a ejecutar y a medir. La idea millonaria nunca rendirá frutos si no la planeas bien, si no la contextualizas no solo desde el punto de vista de la idea, sino de los procesos que se necesitan para ejecutarla, y sobretodo, las implicaciones que tendrán sobre ti y tu empresa (impuestos, nunca olvides esa palabra mágica). Todos los socios deben tener esto claro, y si se niegan a llevarlo de esta manera, es una señal de alarma.

Si es tu empresa, es tu chamba

Si te asocias con otras personas generalmente es con la finalidad de explotar las mejores habilidades y aptitudes de cada uno, con la finalidad de disminuir las debilidades que tiene cada quien al actuar por su cuenta. Siempre he creído la suma de las partes es mucho mayor al todo, especialmente tratándose de seres humanos. Pero también se incrementa la complejidad de llevar una dirección clara. Y para ello todos deben estar involucrados en las áreas de todos, pero sin perder de vista que siempre habrá un responsable. Si fulanito se encarga de llevar la contabilidad, es importante apoyarlo, pero es fundamental revisarlo, nadie puede hacer mutis y fingir que no le corresponde estar enterado de esas cosas.

Sobretodo es muy importante que todos estén conscientes de la situación financiera de la empresa, muchas tonterías se cometen cuando uno tiene poder y no tiene toda la información. Del mismo modo, si bien cada responsable atiende su área y sus clientes, es importante estar interesado e informado de las áreas de otros, si notas que tu socio es muy celoso de compartir el status de sus proyectos contigo u otros socios, es una señal de alerta, puede ser que dichos proyectos no estén siendo llevados de manera adecuada o esté haciendo trucos sucios.

Pero sobretodo, no hay que perder de vista que el objetivo principal, que la meta última es el negocio, y para ello todos los socios deben trabajar con esa premisa tatuada en la frente. Si solo se buscan culpables o se reclama falta de apoyo, hay un problema sistémico.

Respeta los acuerdos y los procesos definidos sobre todas las cosas

Este punto como llega a ser difícil. Es muy raro que comiences una empresa sabiendo todas las situaciones que se puedan presentar, con una manera de operar que te permita disminuir errores o evitar situaciones que pongan en riesgo un proyecto o que te hagan perder dinero. Ten algo por seguro, cualquier error en una empresa cuesta dinero, a veces mucho, otras veces no tanto, pero cualquier imprevisto o situación no esperada desemboca en dinero esfumándose de tu bolsillo. De ahí que es importante que todos los socios estén de acuerdo en la manera en que se va a operar, y que definan la manera de hacerlo, y periódicamente revisarlas y mejorarlas. Aquí el punto riesgoso es seguirlas, quitar tus vicios de trabajos previos, de experiencias previas, y encarrilarte a operar de manera ordenada y coordinada como lo acordaste con tus socios.

La clave en este punto es intentarlo, y si no funciona, mejorarlo o proponer mejoras. La situación de riesgo o el foco rojo es cuando tu socio no cumple lo acordado, y no propone algo nuevo, o peor aún, opera de una manera que es mas riesgosa y/o ineficiente.

Nadie es indispensable y todos deben de aportar valor

En efecto, nadie es indispensable, eso es algo que te dicen aquí y en otros lados, pero creo que tu deber como socio es hacerte indispensable de una manera razonable, donde tu presencia se note con un aumento a la productividad, pero tu ausencia no provoque caos en la empresa. Y todos los socios son responsables de crear valor, pero valor profesional, recuerdo que la mayor justificación de un ex-socio era "es que yo reviso cada cotización que se manda, porque luego tienen faltas de ortografía, y nos podemos quemar con el cliente, esa labor es fundamental". Si, la verdad no dudo que sea una labor importante, pero la verdad no me cayó muy en gracia tener un socio cuyo mayor logro y aptitud era revisar la ortografía de documentos.

Disciplina, disciplina, disciplina

Como empresario eres dueño de tu tiempo, pero ojo, el resto del mundo gira en torno a horarios y días laborales establecidos. Esto viene muy relacionado con el punto de dedicar 100% del tiempo a tu proyecto. Se vale llegar de vez en cuando tarde, habrá ocasiones en las que tengas que echarte las copas con un cliente hasta la madrugada, y sí, al día siguiente estés molido, pero deberán ser excepciones. Si tu socio llega tarde por lo menos una vez a la semana, falta sin avisar, le marcas a su teléfono y no responde, le preguntas situaciones del negocio o de algún proyecto y no te da respuesta o te ignora completamente, son señales de alarma. Y es motivo de gran emergencia si esas señales sobre tu socio te las hace llegar un cliente.

Seguramente cuando comiences tu negocio o sociedad, ya debes haber terminado la preparatoria, asegúrate que tus socios también, tanto física como emocionalmente, y de no ser así, recuérdaselos, las borracheras entre semana no son señales de buen negocio.

Señales de responsabilidad

Se que muchos de los puntos anteriormente escritos caen también dentro de éste, pero no está de más ir señalando algunos otros signos de advertencia. Creo que si eres una persona responsable en el trabajo, lo eres para todos los aspectos de la vida. Si ves que esa persona siempre llega tarde a las reuniones, si no te contesta el teléfono, si no devuelve las llamadas, si no responde los mails, si le prestas dinero y no te paga, o peor aún, se ofende cuando le cobras, va a tener ese mismo tipo de actitudes a nivel laboral, con toda honestidad, nunca te asocies con personas que tengan ese tipo de comportamientos muy marcados.

Otro punto muy fuerte es el título universitario, si no lo tiene, y no le ves señales o disposición a sacarlo, siendo un hito tan importante en la vida, sobretodo como la marca del cierre de un ciclo, ten por seguro que no tendrá la disposición ni la iniciativa para cerrar proyectos, terminar tareas, etc. Y lo digo con conocimiento de causa

La amistad no significa nada

Si crees que llevar 10, 15 años de amistad con alguien significa que puede ser una persona ideal con la que puedes hacer negocios, que puedes depositar tu confianza y nunca te van a defraudar, o que así como le echaban ganas al desmadre en la carrera o en la prepa así van a ser de unidos para hacer negocios, tal vez te lo quieras pensar dos veces. Para no entrar en un cuento largo, de un grupo de 7 amigos de la prepa a los que llegué a considerar casi mis hermanos, hice negocios de diversa índole con 5, y de esos 5 no quedé con ganas de volver a hacer negocios con ninguno, ni por fuerita, ni una simple compra / venta.

Los negocios sacan lo peor de uno, especialmente porque tal y como mencioné previamente, no puedes evitar que tus socios se vuelvan las personas con las que más convives durante esa etapa de tu vida, y por más amigos que hayan sido, por más cercanos, te va a tocar conocer lados oscuros que antes no te habías percatado. Aquí el consejo que te puedo dar, es no ignorar los problemas, o pretender que con el tiempo se van a corregir, si hay situaciones conductuales que no te laten o si de plano no te sientes cómodo trabajando con dicho socio, no dejes pasar tiempo, seis meses deben bastar para detectar si es un socio con el cual puedes llevar una empresa.

Crítica, autocrítica y la capacidad de resolver problemas

Debes criticar a tus socios, en todo lo que afecte negocio, debes ser exigente, debes detectar donde están fallando y hacerlo notar (en privado recuérdalo), es tu vida, y lo que hagan ellos incidirá en ella, sus exitos te traerán exito a ti también, así como sus fracasos te afectarán, no lo olvides, tú estás invirtiendo tu vida en un proyecto, lo menos que puedes hacer es procurar que tus socios no te la echen a perder.

Del mismo modo, debes ser auto crítico, lo que tú haces no siempre está bien, tú manera de hacer las cosas siempre puede mejorar, debes estar abierto a sugerencias, y sobre todo, ante todo debes evitar ser soberbio. La soberbia mata empresas, mata amistades. Nunca lo olvides, ni dejes que tus socios lo olviden.

Nadie te va a echar porras

Te tengo una mala noticia, mi padre decía que tener una empresa es como tener un hijo idiota y malagradecido, y al paso de los años concuerdo en que tiene razón. Solamente vas a escuchar quejas de tus clientes, los gritos desesperados cuando se cae un sistema, vas a tener proveedores furiosos porque no les haz pagado, vas a tener fuertes problemas de liquidez, cuando tengas una mínima de utilidad le vas a tener que pagar un buen porcentaje a Hacienda en impuestos, y justo al final de todo, cuando pienses que lo peor ya pasó, que a pesar de todos los problemas te quedó un poco de dinerito que podrás usar felizmente, te llegará la factura del contador...

Pues sí, ser empresario es algo ingrato, pero creo que ahí está la belleza de este asunto. No es para cualquiera, solo es para gente fuerte, que quiere salir adelante no importando las adversidades, pero hay algo que no te debes sacar de la mente, estás solo, totalmente solo, y tus socios también deben tener eso en la cabeza, los socios no están para echar besos y cariño, no debes esperar apoyo anímico o porras de ellos.

Si todo sale bien, complácete con una comida o cómprate algo no muy caro (no derroches) que te haga feliz. No esperes ni diplomas, ni fanfarrias, ni bonos, eso déjaselo a los Godínez que viven como parias, sujetos a la esclavitud y voluntad del amo.

Alcoholismo

Este punto no lo había considerado sino hasta eventos más recientes (creo que mi visita al torito es motivo de otra entrada), pero ya que empecé a enlazar conflictos actuales con ese factor, me doy cuenta que también es un elemento muy nocivo.

Si tu socio bebe mas de tres veces por semana, y por lo menos un día entre semana, y ello le provoca llegar tarde, crudo, ser grosero con clientes u otra clase de problemas; la verdad es que ni te tomes la molestia, sepáralo de tu empresa, a ti no te corresponde lidiar con su problema o tratar de ayudarlo (recuerda el punto de arriba, la amistad no significa nada). Si a él le interesa, que busque ayuda, sino, pues ni modo, negocios son negocios, recuérdalo.

Conclusiones

Bueno, creo que salieron muchas más cosas de las que hubiera esperado, y la verdad me faltan muchas más, creo que esto es más un recordatorio de las veces que he tropezado, tanto de manera personal como con mis socios, para evitar volver a caer en lo mismo, creo que si escoger una pareja con la cual tener química y llevar un proyecto de vida personal (llámalo matrimonio) es complicado, llevar otro proyecto de vida material (la empresa) con dos o mas personas es una labor titánica.

1 comentarios:

ackzell dijo...

Hay bastante qué rescatar de aquí, gracias por hacerlo público. Al final, algo de lo que me queda más grabado es que ser emprendedor no es para todos. Y creo que tienes razón en que se necesita ser prácticamente soltero por aquello del tiempo disponible y joven por lo de tener energía para aguantar de todo.

Una buena lectura, bastante directa y sin maquillaje de lo que llega a pasar en realidad con los negocios. Hay que saber cómo interactuar con las personas y eso no es nada sencillo.

Aunque también creo(y espero) que al final del día, si sigues haciendo lo que debes de la mejor forma que puedas y aprendiendo de los errores, valdrá la pena.

Publicar un comentario